Juez amenaza a Trump con enviarlo a prisión por desacato de orden mordaza: 'Parece que las multas no bastarán'

Merchan dio inicio este lunes a la tercera semana de juicio al primer expresidente en la historia de Estados Unidos que se sienta en el banquillo.

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Trump, republicano de 77 años, está acusado de 34 falsificaciones de documentos comerciales para reembolsar a su entonces abogado personal Michael Cohen el pago de 130.000 dólares para comprar el silencio de la exactriz porno Stormy Daniels pocos días antes de las elecciones de 2016 que ganó contra la demócrata Hillary Clinton.

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El pago en sí no es un delito. Pero Trump está acusado de disfrazarlo como gastos legales de su abogado.

En plena campaña electoral, Trump se considera víctima de una "caza de brujas" y de una conspiración legal de los demócratas con el actual presidente Joe Biden al frente, para impedirle que realice su anhelado regreso de volver a la Casa Blanca.

Este lunes, el juez le impuso una nueva multa de 1.000 dólares por violar la orden judicial que le prohíbe referirse a lo relacionado con el juicio en sus redes sociales. Es la segunda vez en dos semanas que el juez declara al expresidente culpable de desacato.

La semana pasada le impuso otra sanción de 9.000 por nueve violaciones previas de la orden judicial que le prohíbe referirse a lo relacionado con el juicio en sus redes sociales.

En esta ocasión, a Trump se le multa por haber criticado en una entrevista la velocidad (una semana) con la que se escogió al jurado y su supuesta composición en una ciudad mayoritariamente demócrata.

​En su decisión de este lunes, el juez le advierte que debido a que ésta es la décima vez que el tribunal lo halla culpable de desacatar sus órdenes, "parece claro que las multas no bastarán para disuadir al acusado de violar las órdenes legales".

El juez indicó a Trump que su continua violación de su 'orden mordaza', que le prohíbe cargar públicamente contra testigos, fiscales y miembros del jurado, es un “ataque directo al estado de Derecho” y que no puede permitir que esto continúe.

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Este lunes, en la nueva semana de juicio, se sube al estrado Jeffrey McConney, que trabajó como contable corporativo en la Organización Trump y, según los fiscales, ayudó a organizar el reembolso de un pago de 130.000 dólares a Daniels.
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​A lo largo de las dos primeras semanas han desfilado por el estrado varios testigos que han dejado en evidencia las estrategias para tratar de ocultar las noticias potencialmente negativas para la campaña presidencial del magnate inmobiliario neoyorquino.
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​Pero quizá uno de los más dañinos para Trump fue el testimonio de su exasesora cercana Hope Hicks, que el viernes explicó cómo tuvo que gestionar la "crisis" cuando salió a la luz una grabación en la que el magnate presumía de que alguien famoso como él podía permitirse cualquier cosa para conquistar a las mujeres, tocarles los genitales sin que se inmutaran.

Según los fiscales, el pánico por la grabación desencadenó un esfuerzo de la campaña de Trump para silenciar a Daniels que amenazó con hacer pública una supuesta relación extramatrimonial que habría mantenido en 2006.
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​Se espera que Daniels, cuyo verdadero nombre es Stephanie Clifford, y Cohen, el exabogado de Trump que se ha convertido en enemigo jurado de su antiguo jefe, testifiquen en algún momento en la sala de audiencia del Tribunal Superior de Manhattan, donde se celebra el juicio.
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​Además del caso de Nueva York, Trump ha sido acusado en Washington y Georgia de conspirar para anular los resultados de las elecciones de 2020 que ganó Biden, y de llevarse a su casa de Florida documentos altamente secretos que podían comprometer la seguridad del estado al terminar su presidencia en 2021.

AFP y EFE